La forma, el tamaño y la proporción del rostro de cada persona son diferentes, por lo que no hay un único respirador adecuado para todos. Para garantizar una protección eficaz, es fundamental probar distintos tipos y tamaños de respiradores para encontrar el que mejor se adapte a cada usuario.
Hay varios factores clave que pueden afectar el ajuste de un respirador ajustado:
- Vello facial: Toda persona que use un equipo de protección respiratoria (EPR) ajustado debe estar bien afeitada en las zonas donde el sello del respirador toca la cara. El vello facial en estas zonas interferirá con el sello y reducirá la protección.
- Gafas y otros EPI: Artículos como gafas graduadas y otros equipos de protección personal pueden afectar el ajuste del respirador. Estos artículos deben usarse durante una prueba de ajuste para garantizar que no comprometan el sellado durante el uso.
- Joyas y maquillaje: Deben quitarse todas las joyas o productos cosméticos que entren en contacto con el sello del respirador. Estos pueden interferir con el contacto entre la cara y el sello y comprometer la eficacia del respirador.
Puntos clave:
- La forma y el tamaño del rostro varían: no todos los respiradores se adaptan a todas las personas.
- Los usuarios deben probar diferentes tipos y tamaños para encontrar el ajuste adecuado.
- Un EPI bien ajustado requiere una cara bien afeitada donde el sello hace contacto.
- Se deben usar gafas y otros EPP durante las pruebas de ajuste para comprobar la compatibilidad.
- Quítese las joyas y el maquillaje que puedan interferir con el sello.