Proteger los ojos y la cara en el trabajo es esencial para prevenir lesiones graves, a menudo permanentes. Alrededor del 50 % de los trabajadores industriales sufrirá una lesión ocular importante a lo largo de su carrera. Sin embargo, un estudio de Safety & Health Practitioner (2020) sugiere que hasta el 90 % de estas lesiones podrían evitarse utilizando el equipo de protección adecuado.
Los ojos son vulnerables a una amplia gama de peligros, pero con las medidas de seguridad adecuadas, el riesgo de daños a largo plazo puede reducirse significativamente.
Lesiones oculares y faciales comunes en el lugar de trabajo:
lesiones por impacto
Los escombros, el polvo o las partículas que salen volando de herramientas como grapadoras y herramientas eléctricas pueden golpear el ojo y causar irritación, dolor o incluso daños duraderos.
Ceguera
La exposición a fuentes de luz dañinas, como la radiación ultravioleta (UV), la luz azul o la radiación infrarroja, puede provocar ceguera parcial o total. Esto puede ocurrir de forma repentina o gradual, como en el caso de las cataratas.
Quemaduras
Las tareas que implican soldar, esmerilar o trabajar con metales fundidos pueden provocar quemaduras graves en los ojos y la cara. Estas lesiones pueden ser extremadamente dolorosas y provocar la pérdida permanente de la visión.
malestar visual
El resplandor de la luz solar o artificial, la exposición a los rayos UV o las lesiones físicas pueden causar molestias visuales a corto plazo. Sin protección, estos problemas pueden derivar en problemas de visión a largo plazo.
Fotoqueratitis
Se trata de una inflamación de la córnea causada por la exposición excesiva a la radiación UV. Una forma grave, conocida como ceguera de la nieve, se presenta en entornos con alta reflectividad, como zonas nevadas o de gran altitud.
Pterigión
Esta afección implica un crecimiento en la córnea debido a la exposición prolongada a la luz solar, el viento o la arena. Es común en trabajadores al aire libre que no usan la protección ocular adecuada y puede causar irritación y deterioro visual.
Por qué es importante elegir la protección adecuada:
Para prevenir lesiones graves y duraderas, es fundamental seleccionar el tipo adecuado de protección ocular y facial para el trabajo. Esta protección debe ser adecuada a los peligros presentes, ya sean partículas en suspensión, radiación UV, deslumbramiento o calor extremo, para garantizar la completa protección de los trabajadores.
Resumen de puntos clave:
Las lesiones en los ojos y la cara son comunes, pero en gran medida prevenibles.
Las partículas en suspensión y la luz dañina constituyen riesgos importantes en muchos trabajos.
Las quemaduras por materiales calientes y la exposición a la radiación UV pueden causar daños permanentes.
Las molestias a corto plazo pueden provocar problemas de visión a largo plazo si no se tratan.
El uso de protección adecuada a la tarea es esencial para prevenir lesiones.