Los sistemas de protección contra caídas están diseñados para prevenir una caída o detenerla de forma segura si se produce. Cada tipo de sistema funciona de forma diferente según la tarea, el entorno y el nivel de riesgo. Elegir el sistema correcto comienza por comprender la jerarquía de control, donde la prevención siempre es preferible a la detención de caídas.
Sistemas de restricción laboral
Estos sistemas impiden que una persona entre en zonas donde podría producirse una caída.
El usuario está conectado a un anclaje fijo mediante equipo de protección personal contra caídas (PFPE).
La longitud del cordón o conexión impide el acceso a la zona de riesgo de caída.
Este método elimina la posibilidad de caídas y es una opción segura cuando se puede utilizar.
Sistemas de posicionamiento en el trabajo
Estos sistemas permiten a una persona trabajar en tensión, utilizando su equipo como apoyo, sin riesgo de caída libre.
El PFPE soporta todo o parte del peso del usuario.
Se utiliza comúnmente cuando se necesitan ambas manos para trabajar, como en postes o estructuras verticales.
El sistema debe mantener al usuario seguro en su lugar y evitar cualquier caída.
Sistemas de detención de caídas
Los sistemas anticaídas están diseñados para detener una caída que ya ha ocurrido, manteniendo al usuario seguro y limitando las lesiones.
El sistema incluye un arnés, un conector y un anclaje que trabajan juntos para atrapar al usuario durante una caída.
Las funciones clave de un sistema anticaídas son:
Detener la caída y evitar que el usuario golpee el suelo
Reducir la fuerza de impacto a menos de 6 kN, como exige la norma EN 363
Minimizar la distancia de detención, que varía según el tipo de sistema
Estos sistemas son fundamentales cuando no se pueden evitar los riesgos de caídas.
Acceso por cuerdas – Trabajo en suspensión
Se trata de un método especializado derivado de las técnicas de escalada y se utiliza para acceder a zonas de difícil acceso estando suspendido.
Los trabajadores están sujetos por cuerdas y arneses y pueden utilizar un asiento de trabajo.
Aunque el sistema de cuerda principal sostiene al usuario, siempre se requiere un sistema de protección contra caídas de respaldo.
Esto normalmente se consigue con dos cuerdas:
Una línea de trabajo (para el movimiento)
Una línea de seguridad (para redundancia y protección contra caídas)
Puntos clave:
Utilice sistemas de restricción de trabajo para evitar el acceso a riesgos de caídas.
Los sistemas de posicionamiento en el trabajo permiten trabajar con seguridad y apoyo, sin riesgo de caída libre.
Los sistemas anticaídas se utilizan para detener de forma segura una caída en curso, absorbiendo la energía y limitando el impacto.
Los sistemas de acceso por cuerdas permiten una suspensión segura para el acceso, siempre respaldada por un sistema secundario de detención de caídas.
Seleccione el sistema adecuado según el entorno, la tarea y el nivel de riesgo.