Conocer su exposición general al ruido es importante, pero no es la única información que necesita para seleccionar la protección auditiva correcta.
Para proteger eficazmente la audición, es fundamental comprender los niveles de ruido en un rango de frecuencias específicas. La energía del ruido debe medirse en las siguientes frecuencias:
- 63 Hz
- 125 Hz
- 250 Hz
- 500 Hz
- 1000 Hz
- 2000 Hz
- 4000 Hz
- 8000 Hz
Una vez que tenga estas mediciones, puede usar una tabla de atenuación para determinar qué protector auditivo reducirá el ruido por debajo de 80 dB(A) en cada una de estas frecuencias. Esto garantiza una protección integral en todo el espectro de ruido potencialmente dañino.
Puntos clave:
- Medir los niveles generales de ruido no es suficiente para garantizar una protección auditiva adecuada.
- La energía del ruido debe evaluarse mediante una evaluación de riesgos correcta y adecuada en un rango de frecuencias (63 Hz a 8000 Hz).
- Utilice la tabla de atenuación que se encuentra en las instrucciones del usuario del producto auditivo junto con estos datos de frecuencia para elegir los protectores auditivos correctos.
- El objetivo es reducir la exposición al ruido por debajo de 80 dB(A) en todas las frecuencias medidas.