Los arcos eléctricos representan un peligro extremo para los trabajadores. Un arco eléctrico presenta diversos riesgos, lo que requiere equipo especializado para garantizar la seguridad de los operarios.
Un arco eléctrico se produce cuando la corriente eléctrica salta entre dos conductores. Esto puede ocurrir por diversas razones, como fallos en el equipo, contacto accidental con piezas bajo tensión o trabajos en tensión en equipos dañados.
Cuando se produce un arco eléctrico, se descarga una corriente eléctrica por el aire, lo que genera múltiples peligros. Una enorme explosión de calor, luz, sonido y metralla pone en riesgo de lesiones graves a cualquier persona que trabaje cerca.
Fuego y calor
Un arco eléctrico puede provocar un incendio de alta intensidad y rápida propagación, y el calor generado en la explosión puede alcanzar los 20.000 °C. El EPP debe resistir el calor y evitar la propagación de las llamas en la medida de lo posible.
La norma EN 61482 especifica los métodos de ensayo de riesgo térmico para la ropa de protección contra arco eléctrico. El método de ensayo de caja permite clasificar las prendas como Clase 1 (ensayadas a 4 kA) o Clase 2 (ensayadas a 7 kA), mientras que el método de ensayo de arco abierto determina la clasificación de arco. Tres clasificaciones de arco son aplicables a la ropa de protección: ELIM (Límite de Energía Incidente), ATPV (Valor de Rendimiento Térmico del Arco) y EBT (Energía Umbral de Apertura).
La ropa de protección que cumple con la norma ISO 11612 se somete a pruebas de propagación de llama, rendimiento térmico y protección contra salpicaduras de metal fundido. La norma incluye requisitos opcionales para la protección contra los efectos térmicos de un arco eléctrico y la predicción de lesiones por quemaduras.
La norma GS-ET-29 establece los requisitos de prueba aplicables a las pantallas faciales para trabajos eléctricos, incluyendo la protección térmica y requisitos adicionales de transmitancia de luz. A las pantallas faciales probadas según la norma estadounidense ASTM F2178 se les asigna un Valor de Rendimiento Térmico de Arco (VPA) expresado en cal/cm².
Los arcos eléctricos representan un grave peligro para los trabajadores, con el potencial de causar lesiones graves o incluso la muerte. Un arco eléctrico ocurre cuando la corriente eléctrica salta entre dos conductores, a menudo causado por fallas en equipos, contacto accidental con componentes activos o trabajos en tensión en sistemas dañados. El arco eléctrico resultante libera energía intensa en forma de calor, luz, sonido y partículas proyectadas, todos los cuales presentan riesgos específicos.
Peligros de incendio y calor
La temperatura durante una explosión de arco eléctrico puede alcanzar los 20 000 °C. Este calor extremo puede provocar incendios y causar quemaduras graves. La ropa de protección debe resistir la propagación de las llamas y las altas temperaturas.
La norma EN 61482 cubre la protección contra riesgos térmicos en caso de arco eléctrico.
El método de prueba de caja clasifica las prendas como:
Clase 1 (probado a 4 kA)
Clase 2 (probado a 7 kA)
El método de prueba de arco abierto determina la clasificación de arco de las prendas en función de tres valores:
ELIM (Límite de energía incidente)
ATPV (valor de rendimiento térmico del arco)
EBT (Energía de umbral de ruptura)
La norma ISO 11612 especifica las pruebas de propagación de llama, resistencia al calor y salpicaduras de metal fundido.
Incluye pruebas opcionales para la protección contra los efectos térmicos relacionados con el arco eléctrico y la predicción de lesiones por quemaduras.
GS-ET-29 describe los métodos de prueba para protectores faciales resistentes al arco, incluidos los requisitos de protección térmica y transmitancia de luz.
ASTM F2178 (una norma estadounidense) se aplica a las pantallas faciales con clasificación de arco y asigna un valor ATPV en cal/cm².
Peligros de impacto
Una explosión de arco libera partículas a alta velocidad, incluyendo metal fundido y fragmentos de equipos dañados. Estos representan una grave amenaza para los ojos y la piel.
Los protectores faciales con clasificación de arco se prueban para garantizar su resistencia al impacto para garantizar la protección contra escombros que salen volando, además de los peligros térmicos.
Peligros del ruido
Las explosiones de arco pueden superar los 140 dB, creando niveles de ruido de impulso peligrosamente altos.
La protección auditiva, aunque no siempre es capaz de reducir totalmente el sonido a niveles seguros, ayuda a minimizar la exposición.
Los tapones para los oídos generalmente se prefieren a los protectores auditivos, ya que no contienen materiales conductores y son más seguros en entornos con riesgo de arco eléctrico.
Peligros de la radiación luminosa
Los arcos eléctricos emiten luz ultravioleta (UV) y visible intensa que puede causar daños permanentes a la visión, incluida ceguera.
GS-ET-29 incluye requisitos para:
Transmitancia de luz visible
Filtrado UV
Las pantallas faciales se clasifican por clase de rendimiento para garantizar una protección adecuada.
Medidas de seguridad clave
Los arcos eléctricos pueden tener consecuencias devastadoras. Para reducir el riesgo:
Realizar evaluaciones de riesgos exhaustivas
Evite realizar trabajos en tensión siempre que sea posible
Inspeccionar y mantener el equipo periódicamente
Proporcionar capacitación continua a todos los trabajadores
Utilice EPI certificados según las normas pertinentes para una protección completa
Puntos clave:
Las fallas de arco eléctrico plantean múltiples peligros, incluidos calor, impacto, ruido y luz intensa.
Los EPP deben probarse según normas como EN 61482, ISO 11612, GS-ET-29 y ASTM F2178.
La ropa protectora y las caretas deben ofrecer protección térmica, contra impactos y rayos UV.
Evitar trabajos en tensión, realizar mantenimiento a los equipos y capacitar a los trabajadores son medidas de control esenciales.
La protección auditiva y la selección adecuada de EPP son fundamentales para entornos de trabajo seguros.